La semana pasada hablamos de la importancia de la proximidad, para conseguir tener una cadena de distribución sostenible, y cómo nos ha afectado la no proximidad, tras años de deslocalizar fábricas y materias primas, cuando ha habido problemas de cierres de puertos, falta de contenedores, taponamiento del Canal de Suez…
Uno podría pensar que la conclusión es que, los centros de distribución estén cerca de los clientes y las fábricas cerca de los centros de distribución. Hace tiempo que los fabricantes de coches lo aplican, incluso han incorporado las fábricas de componentes, en sus cadenas de montaje, con lo que eliminan los almacenes de stock y secuencian la incorporación de componentes, conforme van montado el coche. Lo más parecido que hacemos en distribución, sería trabajar si stock y secuenciar la entrada de proveedores, conforme vamos montando los palés que servimos a la tienda.
En la fabricación y distribución de alimentos, no siempre, que la fábrica esté cerca, es la mejor opción. Aplicar simplistamente este criterio, en innumerables veces, he comprobado, que es condenar a una fábrica a ser ineficiente de por vida. Fábricas de productos lácteos lejos de las vacas es un clásico.
Por desgracia, la mayoría de las veces el criterio más usado para instalar la fábrica es que esté cerca de la casa del dueño.
Hace años descubrimos una estrategia que llamamos: PAN, ACEITE Y HIELO, para saber dónde teníamos que ubicar una fábrica, de modo que, viendo la globalidad de los costes, pudiéramos ser lo más eficientes posible. Sé que el nombre de la estrategia no es muy sofisticado; pero para los de logística, que solemos “hablar raro”, esta denominación sirve, como comenté en otro artículo para que nuestra mascota nos entienda,
¿Qué es cada tipo de producto? Lo explico para que mi gata lo entienda.
- PAN. Son aquellos, cuyo producto terminado es más voluminoso que la materia prima. Por ejemplo, con un palé de harina, más levadura, agua y aire, conseguimos 5 palés de pan. Luego nos interesa transportar la harina y fabricar el pan junto al centro de distribución.
Productos tipo Pan pueden son industrias de conservas de pescado. - ACEITE: Se trata de aquellos productos que la materia prima es más voluminosa que el producto terminado. Por ejemplo, necesitamos 4/5 kilos de aceitunas para obtener un litro de aceite, luego la fábrica de aceite debe estar junto a los olivos.
Productos tipo Aceite son las fábricas de aceite de semillas, zumos naturales, gazpachos naturales, etc. - HIELO: se trata de aquellos productos cuya materia prima principal podemos encontrarla en cualquier sitio. En este caso, interesa que la fábrica esté junto al centro logístico.
Productos tipo Hielo son las bebidas y zumos procedentes de concentrado, los productos de limpieza que el noventa y tantos por ciento es agua, etc.
¿No has visto nunca fábricas de zumos naturales y procedentes de concentrados (polvitos) en la misma instalación?
Como conclusión, y parafraseando a Einstein, al igual que el tiempo, la PROXIMIDAD ES RELATIVA. Hay que saber, en cada caso, a qué nos tenemos que aproximar.
Autor: Jose Ramón Illán. Vocal de RALOG.
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