Este refrán resume una de las máximas que tenemos los que trabajamos para clientes. Como decía Feargal Quinn: ”el cliente es el rey”.
Hace unos días, el nuevo presidente de los EEUU ha tomado posesión del cargo, lo normal, por educación, es felicitar a un señor que, te guste o no, lo han votado la inmensa mayoría de los estadounidenses; pero claro, si eres un narcisista soberbio, desprecias a los que le han votado porque no te ven a ti, Pedro Sánchez como el único sol del firmamento; son ciegos y/o fascistas.
EEUU es uno de los top 6 países a los que más exportamos, especialmente moda, tecnología y productos de alimentación. Es uno de los Top 5 de los que más importamos, y sobre todo, es la principal potencia mundial con más el 20% del PIB mundial, frente al 1 coma poco de España.
El narcisista que vive en la Moncloa, cuya soberbia y temeridad no tiene límites, se le ha ocurrido autoproclamarse líder contra su imaginaria internacional fascista y enfrentarse a Trump. No voy a enrollarme con historia; pero nos ha ido fenomenalmente bien siendo aliado de la mayor potencia mundial y nos ha ido de p…. pena cuando nos hemos enfrentado a ellos.
El narcisista ridículo pasará a la historia como el peor gobernante de España, ya ha superado a Zapatero, incluso a Godoy.
Por llevarlo a nuestro mundo empresarial. Somos una empresa de logística, nuestro cliente top 5 es una empresa que representa más del 20% de cuota de mercado, como somos torpes y tenemos malos directivos para esta empresa somos un proveedor pequeño; pero con muchísimo potencial, imagina que llegáramos a ser su proveedor principal, es el sueño de todos los trabajadores de nuestra compañía. Acaban de nombrar un nuevo CEO y el idiota de nuestro director general, en lugar de felicitarle e ir a visitarlo, se dedica a insultarlo en público. ¿Qué futuro le espera a nuestra empresa? Hay que ser idiota y mala persona, para hacer esto. Es patético y da risa, si no fuera porque este narcisista ridículo, que dirige nuestra empresa, llamada España, nos conduce a la ruina.
Hasta el más tonto, que tiene un negocio, sabe que, al cliente, te guste o no, se le respeta y se le trata bien NUNCA MUERDAS LA MANO QUE TE DA DE COMER.
Autor: Jose Ramón Illán. Vocal de RALOG.
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